Mujeres de Venus.

AGUA (Water)

La historia se sitúa a finales de la década de 1930 en la ciudad de Benarés, en el estado Uttar Pradesh, India, donde se mantenía la creencia de que solamente al casarse una mujer con un hombre la vida de ésta tenía sentido. Al enviudar, por ende, la mujer se volvía un ser incompleto e indigno y sólo tenía tres opciones: casarse con el hermano menor de su difunto esposo, morirse con su esposo o ingresar a un ashram de viudas donde el resto de su vida se dedicaría a los quehaceres del lugar y a la meditación.

   AGUA narra la historia de varias viudas que viven en un ashram ubicado al lado de un río, pero se enfoca en la de Chuyia (Sarala Kariyawasam), quien a sus ocho años sus padres la casan con un anciano que fallece en la noche de bodas. Sin entender muy bien lo que está pasando, Chuyia ingresa a ese encierro donde la inocencia y las ganas de vivir son puestas a prueba por las costumbres y tradiciones ideológicas.

   La película fue dirigida por la cineasta y escritora indocanadiense Deepa Metha, se presentó con éxito en el Festival de Cine de Toronto y, además, estuvo nominada al premio de la Academia en la categoría de Mejor película extranjera de ese año. Es la última obra de una trilogía donde la creadora expone situaciones de controversia y cuestionamientos morales a la sociedad de India.

   Primero presentó Fuego (1996), después Tierra (1998) pero con Agua (2005) Metha tuvo grandes dificultades para poder realizarla; el ala conservadora de su país le prohibió filmar y tuvo que cambiar de país, de reparto, e incluso de título, a fin de ocultar los temas que abarcaría y avanzar en la grabación.

  El guión, escrito también por Metha, permite que sintamos empatía con cada una de las viudas que cuidan la inocencia de la nueva integrante en el ashram. Mantiene el balance entre los personajes buenos y malos y poco a poco nos permite comprender porqué los personajes actúan de cierta manera.

  Además de una historia interesante y bien contada, la composición de cada escena es para admirarse; los colores,  escenarios y paisajes nos trasladan a la época y nos introducen a las costumbres de esa sociedad. La música corre a cargo de A. R. Rahman, reconocido compositor de Bollywood y recordado por la música intrigante de Slumdog millionaire (Danny Boyle, 2008).

  Es la primera película que les recomiendo que es dirigida por una directora, pero espero que no sea la última. Está disponible en internet o en algún videoclub con amplio catálogo. No se la pueden perder.